Hace algo más de veinte años los edificios comerciales (oficinas) contaban con unos pocos sistemas de tecnología (ej: cámaras de vigilancia análogas, sistemas de alarma contra fuego, controles de acceso, etc.) todos propietarios, es decir, funcionaban de manera independiente ya que cada sistema tenía su propio cableado y su propia infraestructura; por consiguiente buscar los espacios y la trayectoria de las bandejas o canaletas del cableado de cada sistema para la implementación de dichas tecnologías era algo que se solucionaba una vez que el edificio estaba en su etapa final y no había mayores inconvenientes.
Por lo anterior, en esa época cuando se iniciaba el diseño de un nuevo edificio el arquitecto, el ingeniero estructural, el ingeniero eléctrico, el ingeniero mecánico y el contratista general participaban en las primeras etapas del diseño esquemático (SD), desarrollo del diseño (DD) y la conformación de la documentación de la construcción (CD). Dedicaban tiempo y esfuerzo a las necesidades MEP (mecánica, eléctrica, plomería) que tenía el edificio y que habían sido definidas por el propietario. Como pueden ustedes observar no se consideraba la tecnología de bajo voltaje o sistemas TIC como algo que había que tener en cuenta desde el principio, es decir desde el diseño conceptual del edificio o diseño esquemático (SD).
Pero hoy en día debido a los avances tecnológicos cuando se han resuelto los problemas de ancho de banda en las redes y se han adoptado nuevos estándares y protocolos, la definición de edificio comercial convencional pasa a ser la de “Edificio Inteligente de Nueva Generación”. ¿Pero, por qué de nueva generación? Porque hace unos años se le daba el nombre de Edificio Inteligente a un edificio que en realidad solo estaba automatizado en algunos procesos. Hoy en día la definición de Edificio Inteligente está limitada sólo por la imaginación del propietario, el diseño que se realice y el equipo de construcción.
El panorama de hoy en día es que nos encontramos con que la infraestructura del edificio y el equipo de tecnología TIC son sistemas complejos que necesitan planearse e implementarse minuciosamente para optimizar el desempeño del edificio pues se están desplegando los sistemas de administración de edificios para encargarse de monitorear y controlar aspectos mecánicos, eléctricos, plomería, alarmas de incendios, iluminación, calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC), tratamientos térmicos, fuentes de energía y una variedad de otras tecnologías como redes de tecnología de la información (TI) y sistemas audiovisuales (AV) – todo ello incorporado en un espacio.
El nuevo estándar de BICSI (Building Industry Consulting Service International), sobre Edificios Inteligentes ANSI/BICSI-007-2017 – ICT Design and Implementation Practices for Intelligent Buildings and Premises, define al Edificio Inteligente como el término dado a un edificio que utiliza tecnología de la comunicación para integrar los sistemas del edificio, permitiendo de esta forma una coordinación entre los sistemas del edificio de tal forma que proveen un ambiente seguro, más confortable, productivo o eficiente. Entonces aquí aparece el reto para arquitectos e ingenieros constructores, el edifico tiene un inquilino más que se llama “Tecnología TIC”, inquilino muy exigente en cuanto a condiciones ambientales como temperatura, humedad y compatibilidad electromagnética, requiere además espacios significativos todo exigido por los estándares y manuales de métodos para que el edificio tenga un buen desempeño.
¿Cuál es entonces la solución?
En pocas palabras, podemos decir que la solución está en la temprana coordinación de especialidades, es decir una coordinación detallada entre el arquitecto, el ingeniero estructural, el ingeniero eléctrico, el ingeniero mecánico, el diseñador TIC y el contratista general iniciando desde el diseño esquemático (SD). Como pueden ustedes observar, al grupo de diseño entró un nuevo participante, el diseñador TIC.
A continuación describo de manera superficial los ítems y aspectos más relevantes de la coordinación que debe haber entre el diseñador TIC y los integrantes del equipo de diseño del Edificio Inteligente:
Coordinación Arquitectónica. El diseñador TIC debe aportar su perspectiva sobre los espacios de telecomunicaciones y las trayectorias de los medios de comunicaciones (bandejas, canaletas, ductos), así como los requisitos y recomendaciones de los estándares en cuanto a cielos rasos, pisos y puertas de los espacios de telecomunicaciones, todo de acuerdo con los requisitos y recomendaciones definidos en los últimos estándares y manuales de métodos. Al final de este artículo describo los estándares y manuales de métodos que permiten realizar de manera profesional y a satisfacción del cliente los trabajos de diseño e implementación de estas tecnologías.
Coordinación estructural. Al igual que con la coordinación arquitectónica, el diseñador TIC debe aportar su perspectiva sobre las canalizaciones verticales y horizontales, que en ocasiones se cruzan con columnas y vigas y de la misma forma la coordinación referente a los pesos de los equipos que se instalarán en los espacios de telecomunicaciones. En algunas ocasiones se instalan UPS´s distribuidas para dar soporte a los equipos críticos de la red y las baterías de dichos equipos tienen dimensiones y pesos que hay que tener muy en cuenta con el ingeniero estructural en el momento de hacer la distribución de las cargas para las placas.
Coordinación Mecánica. El ingeniero mecánico deberá proveer a los espacios de telecomunicaciones con las condiciones ambientales de temperatura y humedad que exigen los equipos sensibles. En ocasiones se requieren cálculos para estimar la carga térmica, lo cual debe hacerse en coordinación entre el ingeniero mecánico y el ingeniero de diseño TIC.
Coordinación Eléctrica. Esta coordinación entre el arquitecto, el ingeniero eléctrico y el diseñador TIC es fundamental para el buen desempeño de los equipos de tecnología, hay que cumplir con la compatibilidad electromagnética que no es otra cosa que buscar espacios de telecomunicaciones que no se vean afectados por la interferencia electromagnética de subestaciones, cuartos eléctricos, motores de ascensores, entre otros.
Herramientas para el diseño TIC de un edificio Inteligente. Los siguientes estándares y manuales de métodos son las herramientas básicas para realizar un diseño y una instalación TIC profesional:
Conclusiones:
1) El diseño de un Edificio Inteligente, por la tecnología que involucra hoy en día, debe iniciarse desde el diseño conceptual del edificio.
2) Es muy importante la selección del diseñador TIC, se debe verificar que realmente cuente con las herramientas que le permitirán desarrollar un diseño profesional, acorde a los estándares y manuales de métodos. Otra garantía en la selección del diseñador TIC es que éste cuente con una certificación internacional otorgada por un organismo de reconocido por la industria TIC como lo es BICSI. En BICSI existen cuatro certificaciones relacionadas con el diseño: RCDD, DCDC, OSP Design Consultant y RTPM.
3) Un diseño formal detallado es una referencia para que el instalador desarrolle los “Procedimientos de Instalación” que deben seguir todos los grupos que ejecutan las actividades, esto permite tener al final una instalación homogénea y desarrollada con buenas prácticas.
4) El arquitecto e ingeniero constructor debe facilitar la coordinación entre las diferentes especialidades para que el diseño sea lo más real posible.
5) Contar con un diseño formal de los sistemas TIC tiene las siguientes ventajas:
a. Facilita la conformación de los pliegos de licitación para la implementación de los sistemas TIC.
b. Coloca a todos los proponentes bajo un mismo alcance lo que va a permitir hacer una evaluación de propuestas más fácil.
c. A los proponentes se les facilitará elaborar sus propuestas, ganando tiempo en el proceso licitatorio.
6) Finalmente, podemos decir que el reto está en la correcta elección de un diseñador TIC basada en criterios de selección previamente establecidos, el uso de herramientas apropiadas y la coordinación a tiempo de todas las especialidades.
